24 de mayo de 2013

El ajedrez y los guionistas

Todo jugador de ajedrez de nivel medio puede intuir con dos o tres jugadas de antelación si su rival está en condiciones de darle jaque mate; y con más razón si el desenlace puede producirse en la jugada siguiente. Por lo tanto, hará lo necesario para que eso no ocurra; esto es de manual y no admite discusión, salvo si enfrente tiene a un Capablanca o un Morphy, algo que no viene al caso. 

Lo cierto es que los guionistas de cine o de televisión parecen no tener la más remota idea de lo que es una partida de ajedrez, o sí lo saben, pero confían en que el espectador lo ignore. Por lo tanto, TODOS, o la inmensa mayoría de ellos, hacen exactamente lo mismo: cuando los personajes de una escena dialogan frente a un tablero de ajedrez, invariablemente utilizan como remate contundente de una frase, esas dos palabras nefastas para el jugador que les escucha: JAQUE MATE! 

El interlocutor que lleva la voz cantante y tiene la “última palabra” es SIEMPRE el que está en posición ventajosa y le asesta el fatídico JAQUE MATE a su adversario, que queda boquiabierto por partida doble: ha sido derrotado en el diálogo y en el tablero. Nunca se da el caso en que pueda decir “tu me dices esto pero yo te doy JAQUE MATE”. 

Habría entonces un reparto de éxitos y eso restaría dramatismo a la escena. El guionista puede valerse legítimamente de este recurso y así lo hace, sin forzar mucho su imaginación, pero para el espectador o espectadora que sabe algo de ajedrez, resulta chocante ver esta escena una y otra vez: parecería que el triunfante en el diálogo tiene la potestad de ganar también en el tablero y eso, en la realidad, no tiene por qué ser así. 

La escena termina y la historia continua siguiendo el argumento de la obra, pero ver tantas veces lo mismo ya me produce hartazgo pues sé por anticipado lo que va a ocurrir. Un poco más de imaginación por favor, o sino, no mezclen al ajedrez en esos remates efectistas. El llamado juego ciencia tiene un poco más de previsibilidad, porque los ajedrecistas sabemos si nuestro rival está en posición de rematar la partida, o no, en su siguiente movimiento. 

El ajedrez ayuda a pensar y a razonar. Muchos deberían practicarlo, también los guionistas.
- José T.
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